La primera lección mediática del fiasco olímpico de la candidatura Madrid 2020 viene a reconducirse a la enseñanza de que no organizaremos los Juegos porque somos poco menos que ridículos y ahí esta el video de la alcaldesa de Madrid para demostrarlo. La cuestión es: ¿los habríamos organizado si el inglés de Ana Botella hubiese sido impecable? La respuesta nos la proporcionan las casas de apuestas. Antes de que el hazmerreír adviniese Tokio estaba a 1,71 y Madrid a 3,89. ¿Y porqué? Pues por lo mismo que en Eurovisión ganan los que ganan y España queda donde queda Todo es un montaje con tantas garantías de igualdad, mérito y capacidad como un proceso de consolidación de empleo
La segunda lección mediática la encontramos entre la asimetría entre lo que los periódicos decían antes y lo que han dicho después Antes el panegírico Luego los intensos análisis críticos construyendo algoritmos explicativos del estrepitoso fracaso Algo así como lo que ocurre con la pandilla de sabios economistas que no dijeron ni mu antes de la crisis y que cuando vino la crisis lo sabían todo, lo explicaban todo y tienen razón en todo
La tercera lección es que nadie con dos dedos de frente debe engullir el punto de vista sobre las cosas que ofrecen y con que comercian los medios de comunicación Ni del lado de la izquierda, ni del lado de la derecha Ni El Pais, ni El Mundo. Vale más asumir las propias limitaciones en la visión de lo que ocurre que dar por ciertas las visiones que se perciben con las antiparras mediáticas.