De nada ha valido la conversión del alcalde de Benicull del Xúquer (1.000 habs. ) a la iglesia única y verdadera. Su profesión de fe ante los círculos abjurando de la política de castas ha resultado baldía. Los ayatollahs del Pablo le han escupido en la cara como a un ramero arrojándolo a la jauría post-eurocomunista que desde luego dará buena cuenta del tránsfuga y de su futuro político. Ale, a cagar. Pierde así Benicull del Xúquer la oportunidad de pasar a la historia como el primer municipio de España consagrado a la devoción mistico asamblearia. Ahora será absorbido por el tunel del tiempo y sus habitantes pasados a cuchillo.
Puros, os quiero puros,... !!! Clama entre las gentes la voz de Pableras extendiendo los brazos al altísimo que lanza rayos a diestro y siniestro. Continuará. Porque seguro que aparece otro converso que proclama la fe en el único y verdadero Pablo. Podemos.