Algunos días antes de que el Rey Juan Carlos I comunicase su deseo de abdicar la cantante Rihanna aprovechó su recién estrenado estatus de icono fashion del año -un galardón que esa misma noche le concedía el Consejo de Diseñadores de Moda de América- para lanzar su apoyo, como una de las principales damnificadas por Instagram (la red social clausuró su cuenta personal a raíz de unas fotos en las que posaba desnuda), al movimiento #FreeTheNipple. El movimiento fue iniciado por la sutil Scout Willis -la hija de Bruce Willis y Demi Moore - quien protestó contra la censura al desnudo en Instagram practicando topless por las calles de Nueva York, en forma impactante y reveladora. Una, la de sumarse a la iniciativa nti censura revalidando además su título de atrevida y polémica, que Rihanna desempeñó con la ayuda de un sugerente vestido con el dejaba poco, o más bien nada, a la imaginación.