El culo y la inteligencia son una de tantas manifestaciones de la reinante hipocresía social. De este modo si un encuestador de Callejeros interpela en la Gran Vía a un transeunte preguntándole cual de esas dos cosas [ el culo o la inteligencia ] es más trascendente e importante cabe suponer que el transeunte interpelado respondera que la inteligencia. Sin embargo Corporación Dermoestética no vive de operar la inteligencia: vive de rellenar de silicona. Relleno que cada vez más se ubica en los culos. Porque todo el mundo parece estar contento con la inteligencia que tiene, ya que no existen señales que muestren que se hacen cositas para aumentarla, pero un cierto [ y creciente ] sector de la población parece padecer el problema de no tener un culo lo bastante gordo. De forma y manera que es más factible encontrar una persona cuyo anhelo sea incrementar el volumen de sus posaderas con implantes de silicona que una persona que aspire a incrementar su rendimiento intelectual.

Estas razones sin desperdicio encuentran causa explicativa en las imágenes que me he encontrado de la reciente Cibeles Madrid Fashion Week, paserela de la moda recientemente celebrada donde precisamente allí donde se apunta en lo antedicho parece encontrar diana. El culo. Todo el diseño, toda la moda, todo el fashion,... viene a quedar configurado como un satélite apendicular del astro que rige el universo humano. El culo. Mejor cuanto más gordo.