Hoy ha salido en las televisiones un calvo al que el Mariano ha enchufado de Menistro de las Culturas anunciando que desarrollará "medidas de puesta en valor de la tauromaquia y ayudas de acción y promoción cultural en el mundo del toro". Por ello, se ha comprometido a convocar la Comisión Consultiva Nacional de Asuntos Taurinos, a fin de preservar la tauromaquia con el mantenimiento de una reglamentación básica en los aspectos fundamentales de los espectáculos taurinos.
El anuncio – o en cierto sentido amenaza – forma parte de la campaña que la contrarrevolución marianista ha empezado a lanzar pocas horas después de que las cifras del paro hayan puesto de manifiesto que el líder de los calvos y las rancias lo único que saber hacer en materia económica es pavonearse por las Europas como si fuera el no va más. Y así en el combate de su incapacidad de solventar el asunto de las perras abrió hace poquito el frente del antiabortismo, abre hoy el frente del taurinismo y seguro, seguro, que dentro de unos días abrirá el frente del contramariquitismo prometiendo una reforma en profundidad del matrimonio por el rito gay – asunto al que tuvimos ocasión de referirnos en tema precedente -. Y así conviene no olvidar que el registrador de Santa Pola en excedencia que rige los destinos de nuestra Patria lo que prometió en las palabras elecciones era que no iba a tocar los impuestos o que iba a reducir el paro,… no que se comprometía a resucitar la Comisión Consultiva Nacional de Asuntos Taurinos a través de un calvo.
Conclusión y en resumidas cuentas: que mientras lo de las Oposiciones a Correos y otros procesos selectivos está como está y no hace falta que lo diga para lo de las corridas de toros se abren con el Mariano nuevos esplendores. Y posiblemente estas sean las únicas corridas esplendorosas que cabe esperar con el Mariano.